Rigidez
Aunque rara vez es el principal síntoma a inicios de la enfermedad de Parkinson (EP), la rigidez se experimenta como inflexibilidad de los brazos o piernas más allá de lo que la persona podría sentir como envejecimiento normal o por artritis. Algunas personas lo llaman "tensión" en sus extremidades. La rigidez puede ocurrir en uno o ambos lados del cuerpo y llevar a un menor rango de movimiento. Esto puede resultar en malestar o dolor en los músculos o las articulaciones afectados.
Muchas personas con la EP tendrán un balanceo de brazos reducido al caminar y más aún del lado más afectado. También es posible que haya rigidez del tronco.
La rigidez también puede afectar negativamente la calidad del sueño. La rigidez a última hora de la tarde y la mala movilidad en la cama pueden dificultar quedarse y permanecer dormido por la noche.
La rigidez es uno de los tres síntomas reveladores que ayudan a los médicos a hacer un diagnóstico de Parkinson. Los otros dos son la ralentización del movimiento (bradicinesia) y el temblor en reposo.
Página revisada por el Dr. Kevin Duque, investigador clínico en Neurología, División de Trastornos del Movimiento, en la University of Cincinnati.