Temblor
El temblor es a menudo el primer síntoma motor de la enfermedad de Parkinson (EP). El temblor típico de la EP ocurre principalmente en reposo (conocido como temblor en reposo) y disminuye durante el sueño y cuando la parte del cuerpo está activamente en uso. Por ejemplo, su mano puede temblar mientras está sentado o incluso mientras camina, pero cuando la extiende para estrechar la mano de alguien, el temblor es menos notable o se va completamente. Un 50% de los pacientes también puede presentar un temblor que puede reaparecer al extender los brazos a los lados o al frente.
El temblor tiende a ocurrir en las manos y a menudo se describe como “rodamiento de píldora” (imagine que sostiene una pastilla entre el pulgar y el índice y la rueda continuamente) y/o “supinación y pronación” (con la palma hacia arriba y hacia abajo). Sin embargo, el temblor también puede aparecer en otras partes del cuerpo, incluyendo el labio inferior, la mandíbula o la pierna. Estos temblores pueden interferir con las actividades de rutina como afeitarse, vestirse, escribir y muchas otras tareas que requieren una coordinación motora fina.
Algunas personas reportan un temblor interno, una sensación de temblor dentro del pecho, abdomen o en extremidades que no se puede ver.
El temblor generalmente comienza asimétricamente, afectando sólo a un lado del cuerpo, especialmente durante las primeras etapas de la enfermedad. Con la progresión de la enfermedad, ambos lados pueden verse afectados. La fatiga, el estrés o las emociones intensas pueden empeorar temporalmente los temblores.
¿Quién experimenta el temblor?
Alrededor de un 70-90% de las personas con Parkinson experimentan un temblor en algún momento de la enfermedad. El temblor parece ser ligeramente menos común en las personas más jóvenes con la EP, aunque sigue siendo uno de los síntomas más problemáticos. Las personas con temblor en reposo generalmente tienen una progresión de la enfermedad más lenta que las personas sin temblor.
Temblor en otras condiciones
Si bien el temblor es un síntoma común de la EP, también puede ser un síntoma de otras condiciones, especialmente el temblor esencial. La principal diferencia entre el temblor de Parkinson y la mayoría de los otros tipos de temblor es que en la EP el temblor en reposo es más común. Otras condiciones generalmente se caracterizan por “temblor de acción”, que tiende a disminuir en reposo y a aumentar cuando se hace algo, como tratar de hacer una llamada telefónica o tomar una bebida. Los temblores de la cabeza y la voz también son comunes en el temblor esencial, pero son raros en la EP.
Manejo del temblor
La levodopa es el medicamento que se administra con mayor frecuencia para controlar los síntomas motores de la EP y el temblor generalmente, aunque no siempre, responde al tratamiento con levodopa.
Si los medicamentos dopaminérgicos (aquellos que estimulan las partes del cerebro afectadas por la dopamina, una sustancia química necesaria para controlar los movimientos), como la levodopa, no funcionan para controlar el temblor, a veces se usan otros medicamentos. Por ejemplo, los anticolinérgicos pueden ser útiles para el temblor. Estos medicamentos mejoran los síntomas del Parkinson al bloquear la sustancia química del cerebro acetilcolina. Sin embargo, también pueden tener significativos efectos secundarios mentales y físicos, por lo que su uso debe considerarse cuidadosamente. Los anticolinérgicos son más útiles en los jóvenes con la EP con predominancia del temblor (cuando el temblor es el síntoma principal que necesita tratamiento).
Si los medicamentos no son eficaces, las intervenciones quirúrgicas, como la estimulación cerebral profunda (ECP, o DBS por sus siglas en inglés) y el ultrasonido focalizado (FUS, por sus siglas en inglés), pueden ser eficaces para controlar el temblor, incluso aquél que no responde a los medicamentos. Hable con su médico acerca de la ECP y otras opciones quirúrgicas que pueden ayudar con el temblor.
El tratamiento para el temblor interno es el mismo que para el temblor visible.
Además de la medicación y el tratamiento quirúrgico, hay dispositivos de asistencia que pueden ayudar con varias actividades de la vida diaria. Uno de ellos es Liftware, un utensilio con un mango estabilizador para contrarrestar el temblor relacionado con la EP. Está disponible con accesorios para cuchara y tenedor y ayuda a estabilizar la mano, de modo que puede facilitar tomar la comida y llevarla a la boca.
Por último, pero no menos importante, el ejercicio es tan importante como los medicamentos y otras terapias para controlar los síntomas del Parkinson y llevar su mejor vida posible.
Página revisada por el Dr. Kevin Duque, investigador clínico en Neurología, División de Trastornos del Movimiento, en la University of Cincinnati.